Ejido Frontera Comalapa, Municipio El Portal, Chis. A 23 de Diciembre. Rotas sus piernas, como roto está el tejido social en Frontera Comalapa; el alcalde de este lugar, Irán Mérida Matamoros, es la viva imagen de la descomposición que vive el pueblo comalapense, y, aún así, en lamentables condiciones, se presentó a leer su “Segundo Informe” de labores ante varios de los regidores y acarreados.
Los regidores, por cierto, pusieron como condición para asistir a legitimar el informe de Mérida Matamoros enormes cantidades de dinero, pero el edil que camina con muletas porque estando borracho cayó de uno de sus caballos no sólo consintió en dárselo en efectivo, sino que además decidió ir más lejos: les regaló, a todos los que asistieron, un pantalón, una camisa, unos calzones tipo boxer, calcetines, comprados en la capital del estado, así como también un par de zapatos adquiridos en la cabecera municipal.
Los únicos regidores que no recibieron el premio de alrededor de cien mil pesos, pantalón, camisa, boxer, calcetines y zapatos fueron Francisco Córdova Figueroa y Rafael Rodríguez Majay, quienes decidieron mantenerse al margen a fin de no legitimar a un alcalde que a pesar de que va en cuenta regresiva sigue sin aprender a gobernar.
Pero, sobre todo, el edil de las diez amantes reconocidas (una de ellas menor de edad), se presentó a leer un informe de gobierno a pesar de que no ha sido, ni es gobierno, pues este municipio fronterizo se ha convertido, gracias a Mérida Matamoros, en un pueblo sin ley.
No informó de obras relevantes programadas y ejecutadas en el 2009, debido a que el gobierno del estado dejó de suministrarle los recursos que le corresponden administrar para la realización de obra pública, y se ha quedado sólo con los recursos que corresponden al pago de salarios de los trabajadores, correspondientes al gasto corriente.
De hecho, ni siquiera ha concluido las obras que en el Primer Informe de Gobierno del 2008 dio por realizadas, mintiéndole al pueblo comalapense al informar que ya se habían ejecutado, a sabiendas de que apenas iniciaban o llevaban un avance físico raquítico.
Después en la repartición de la comida todos los campesinos que asistieron recibieron de comida barbacoa de res, tres tortillas, un poquito de arroz blanco y un refresco, quienes se sentaron en las banquetas a comer, mientras que su Presidente se fue a convivir y “conbeber” con las demás personalidades a su rancho, en las afueras de esta ciudad.
Irán tuvo la desfachatez de informar de la reconstrucción de calles a pesar de que ese trabajo lo realizaron los transportistas que se vieron en esta necesidad, ya que las calles estaban hechas un desastre y llenas de baches que en esta temporada de lluvias parecían lagunas. Fsur.
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