En el blog de En Caliente (www.en-caliente.blogspot.com) se abrió un espacio democrático para la discusión o el debate de ideas, con el fin de que los visitantes puedan dar a conocer sus puntos de vista sobre los temas abordados, dejar información relevante para ser publicada o inclusive para denostar en contra de nuestra política editorial o mi propia persona. Sin embargo, de última hora ha venido entrando a dejar sus "escritos" un tal "El Durito" (se puede opinar con pseudónimo y cambiar de pseudónimo las veces que se quiera e inclusive escribir con el nombre o pseudónimo de otro), quien pareciera tener la intención de coartar la libertad de expresión de los demás lectores, o bien "desaparecer" los otros comentarios dejados ahí.
Si mal no recuerdo, ese espacio en el blog es conocido como Chatbox, un software de mensajería instantáneo (Msn Messenger) integrado al foro.
Hace algunos meses el espacio del Chatbox en el blog de En Caliente era muy pequeño, pero a raíz de los intereseantes comentarios, a favor o en contra de algún personaje, o a favor o en contra de nuestra política editorial, tomamos la decisión de hacerlo más grande.
Algunos lectores, detractores, dudaron que tuviéramos el valor civil para ampliar ese espacio de expresión, y de una vez advirtieron que lo utilizarían para denostarnos. Aceptamos el reto, y el espacio se hizo crecer, con el apoyo de nuestros amigos de Red Chiapas (gracias Homero, dejo tu número de celular para que contraten tus servicios: 9631246895), quienes no sólo han venido haciendo las actualizaciones de forma eficiente, sino también de forma económica.
Inclusive, ahí los amigos o familiares o quizá los propios personajes que son objeto de nuestra crítica, han entrado ha dejar amenazas de muerte en contra de este servidor, Disraelí E. Angel Cifuentes.
Son expresiones válidas, respetables, al menos lo son para mí, y las tomo con las debidas reservas, y si algún día las cumplen ni modo, para eso estamos, nadie tiene comprada la vida, menos los que nos dedicamos a este oficio...
El problema es que ahora entra a escribir a cada rato "El Durito".
Los chipocludos de Red Chiapas bien pudieran entrar a BLOQUEAR a "El Durito", no les toma más de unos cuantos minutos.
Pero sería también censurarlo, y a eso es a lo que no queremos entrarle. Es como atacar a la delincuencia incurriendo en violaciones a la ley, delinquiendo.
De otro modo, ya hubiéramos bloqueado a quienes nos amenazan de muerte, y si no censuramos a éstos, menos lo haremos con "El Durito".
De tal modo que si todo lo que escribe "El Durito" es para censurarnos, o mejor dicho para censurar a nuestros visitantes, es porque obedece órdenes de alguien a quien día a día se le viene criticando.
Si nuestra hipótesis es atinada, el "censurador" encontró un buen estilo para ejercer su censura.
Y si esa no es su intención, entonces le suplicamos a "El Durito" que por favor sea más breve.
No vamos a censurar al "censurador" que atenta contra la libre expresión en el Chatbox de En Caliente, si los lectores no quieren ver opacada o censurada su opinión en ese espacio de libre opinión, la sugerencia sería que "guarden" en algún archivo su texto, y cuando aparezca "El Durito" vuelvan a colocarlo.
O simplemente envíen su material a nuestro correo, que está a la vista.
Por lo tanto, que sigan las críticas y, si gustan, las amenazas de muerte.
Nosotros creemos en la pluralidad, en la divergencia.
Es más, aunque no creyéramos en ellas, de todos modos existen.
La diversidad no es resultado de un acto de fe, existe y punto, y hay que convivir con ella.
¿Quién dijo: "podré no estar de acuerdo contigo, pero defenderé con mi vida tu derecho a decirlo"?.
Sea quien haya sido, o si nadie lo dijo, o lo hizo de otra manera, esa es una forma de decir que los puntos de vista de los otros u otras se respetan, aunque sean opuestos a los nuestros.
Yo, Disraelí Angel Cifuentes, tomé la decisión de no contestar en el Chatbox ni una sola expresión, sea a favor o en contra.
Ese espacio será para la visita, punto.
Mis puntos de vista, o las de mis colegas periodistas, irán en la parte de arriba, en el cuerpo principal del espacio de En Caliente.
Ahí expresaré mis opiniones, no en el Chatbox.
De tal manera que cuando alguien escriba utilizando mi nombre, en realidad se trata de algún sujeto que se esconde tras las espaldas de Disraelí, su servidor, un maestrito y reporterito de quinta con los suficientes pantalones como para dedicarse a este oficio.
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