Felicitaciones para Ada Iveth Morales Lara y Dalia Villatoro, quienes cumplieron año y la pasaron en grande. Estoy seguro que la pasaron bien. Yo no pude ir porque la Sari es muy celosa. No le gusta que yo ande abrazando a otras. Me pega. En serio. Pesa sobre mi cuerpecito un tremendo matriarcado. Es más, cree que antes anduve con las dos cuando era yo Delegado de Comunicación Social del Gobierno del estado, con eso de que tengo un 
historial negro de mujeriego y queridero. Por eso aceptó gustosa que me fuera yo a encargarme de la comunicación social del Congreso del Estado. Y eso de que pesa sobre mí un matriarcado cabrón es lo mínimo que estoy diciendo, me avienta tremendos “planchazos”, así me aquieta. Primero me golpea y me tira al suelo, luego se sube a la cama y de ahí se lanza como el SUPERPORQUI y termino con los ojos por fuera. Y es que la Sari practicó ese deporte asiático que se llama SUMO, o algo así, y entonces no hay por donde. El Lalo y la Deni luego me defienden con sus patadas voladoras, porque saben tae kwon do, pero ni así. Mil disculpas, pues, mis estimadas colegas. Ya la Sari les llevará su regalo en mi nombre y en el de El Fronterizo del Sur.
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