Gorda Misógina
Ah qué mal se está viendo
¿Quiénes son esos regidores que no se avergüenzan de cobrar sin trabajar, o quizá se están preparando para cuando se conviertan en “robo a la nación”, es decir, diputados? Uno se llama Alejandro Guillén González, es el líder del grupito y es constructor. Carlos Martín López Hernández, obediente seguidor del primero, y ahora Enrique López López, quien fue puesto ahí por
Como sea, la sociedad margaritense está pidiendo la intervención de las instituciones para que tomen alguna de dos opciones: o se ponen a trabajar como manda la ley, o se les retirA del cargo.
Y es que, hasta hoy, los regidores tricolores margaritenses sólo han asistido a cuatro reuniones de cabildo, y ya vamos nueve meses cumplidos.
Y entre sus obligaciones, por las cuales la sociedad les paga una buena lana, está precisamente la de asistir a las sesiones ordinarias y extraordinarias de cabildo. Además de acordar, cuando menos dos veces por semana, con el Presidente Municipal, acerca de los asuntos de su competencia.
También deberían presentar los dictámenes correspondientes a sus atribuciones, en los asuntos a tratar en las sesiones ordinarias y extraordinarias de cabildo y algo tan sencillo como concurrir a las ceremonias cívicas y a los demás actos a que fueren convocados por el Presidente Municipal.
Estos tipos no participaron ni en el desfile.
Por si fuera poco, el líder de estos regidores que tanto defiende la diputada Arely Madrid, el constructor Alejandro Guillén González, sigue pidiendo obras, chantajeando; este señor ya fue director de obras públicas en el municipio de
Por si fuera poco, lanza amenazas en contra de los regidores que no son de su partido y contra la estabilidad social del municipio.
Por eso, vale la pena recordarle a los regidores tricolores de tzejebelandia los motivos por los cuales se puede solicitar ante el Congreso del Estado la suspensión definitiva de los integrantes de un ayuntamiento, según lo estipula el Artículo 174 de
- Abandonar sus funciones por quince días consecutivos sin causa justificada. (Ya llevan nueve meses de abandono)
- Faltar a tres sesiones de cabildo sin causa justificada en un periodo de treinta días. (No sólo van tres sesiones, sino más de 30).
- Suscitar conflictos internos que hagan imposible el ejercicio de las atribuciones del Ayuntamiento; (andan amenazando al alcalde y a los regidores perredistas).
- Fallar reiteradamente al cumplimiento de sus funciones. (Sólo cobran, de sus funciones ni se acuerdan, ya olvidaron qué comisión les corresponde).
Y otras más.
Por si esto no fuera suficiente, la única regidora del PRI que sí estaba trabajando, visitando comunidades, batiendo lodo con sus zapatos en los ejidos, y apoyando los trabajos del ayuntamiento de manera constitucional, ya fue destituida por Arely Madrid.
El pecado de la ex regidora Florinda Sántiz Sántiz fue ser distinta a sus compañeros regidores del PRI, quienes no sólo no quieren trabajar para que a la sociedad margaritense les vaya bien, sino sabotean el trabajo del ayuntamiento para que a la gente le vaya mal, y así tener la esperanza de ganar votos en la siguiente elección municipal.
Arely Madrid Tovilla es, de hecho, una priista misógina, porque siendo mujer está quitándole la oportunidad a una compañera de su género de demostrar que se puede ser oposición responsable.
Por eso ya le cambiaron apodo, en lugar de se la negrita (dicho así, con cariño) pasó a ser simplemente la gorda misógina.
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