Él es profesor de primaria (o era, no sé si regrese a su aula dentro de diez meses, ¿ya pa” qué?), egresado de la Escuela Normal Rural “Mactumatzá”, según decires. Puede ser, su verbo es abundante, atinado, correcto, inclusive mesurado; yo diría, también, inteligente.
Hasta aquí todo bien y mi amigo el CaDoMi no habrá de censurarme todavía. El problema es, como siempre, la calentura, porque la única fidelidad que practica, y debe ser reconocido, es a su partido político: Acción Nacional (PAN).
(Oh Dios mío, un egresado de la Mactumatzá orientado hacia la “derecha política”. ¿Cómo la Mactumatzá va a generar esos especimenes? ¿Un mactumatzero derechista, un egresado de la escuela del socialismo, donde se desayuna, come, cena y hasta el postre son libros de marxismo?
¡Es increíble! Pero bueno, de todo se da en la viña del señor).
Este calenturiento lleva en su haber dos matrimonios en su haber; uno cuando era un mozo rebosante y enjundioso, y, otro, tiempo después.
La primera era mayense, de allá por los rumbos de Palenque, Playas de Catazajá, esos lares. Fue a trabajar como docente para allá y en las comunidades rurales el maestro es el líder, el poderoso, el atractivo sexual para todas las mujeres, porque es quien controla al campesinado del paraje. Ese poder le consiguió mujer.
Su segundo amor, ahora sí, es de Pinola, es la Lola.
Pero, oh malditas calenturas, ya se está divorciando de ella. No bien asienta en un nidito, ya anda husmeando y revoloteando sobre otro, u otros. Así de coscolino es el señor. Aprovecha cada instante. Es inquieto. Coqueto. Por ai me dicen que le apodan “pulpo”, porque sus manos no son manos, son verdaderos…
Y VA POR LA TERCERA MUJER.
Hablamos de las “oficiales”, “catedrales”, no se cuentan las “ermitas” y “capillitas”, ocasionales.
La nueva mujer, por cierto, es una pollita, quizá unos 20 años, la edad de su hija, del primer matrimonio. Ah mañosón y pervertidor de menores jijiji.
Pero... sí les diré quién es, total es la verdad: ella es su secretaria. Ah ¡qué regalo! el día de la secretaria, y el día del amor, y etc.
Él ni siquiera conocía a la chica, hasta que llegó a pedir trabajo a palacio municipal.
Nomás la vio y comenzó a pensar: “Concedido, el Trabajo es Tuyo… y yo también”.
Amor a primera vista.
Los dictados con pierna cruzada dieron resultado.
Pero no vaya a usted a pensar que eso es todo.
Porque antes el señor andaba de “ojo alegre” con su primera secretaria, pero se la ganó el regidor Fredy Tenorio alias “Tigre de Santa Pinola”, aunque esa historia ya la relatamos acá mismo en “Las Calenturas de un Regidor Pinolteco” (si usted tiene acceso a Internet copie y pegue en Dirección todo esto: http://en-caliente.blogspot.com/2007/02/las-calenturas-de-un-regidor-pinolteco.html, y ahí conocerá la otra historia, más buena todavía, puras calenturas.
Lo cierto, en el caso de “El Cínico” de Las Rosas, es que va haber boda antes que concluya la administración de Ramiro Aguilar Castañeda, debe ser antes para que algo aporte el erario, aunque sea la música, aunque para eso está mi amigo Don Francisco El Mariachi, quien le puede ambientar gratis, incluyendo canciones como el “Corrido de Chemingo Meneses”.
JORGE MANUEL DIAZ PENAGOS
Otro político que utilizó el poder para conseguir mujer fue Jorge Manuel Díaz Penagos “El Chico”.
De plano que no le caía nada hasta que se hizo presidente municipal, en el trienio anterior.
Este tipo utilizó también el poder para ganar sensualidad y erotismo.
Pero esa es “otra historia”.
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