El Caliente ahora anda escribiendo como chompipe (guajolote): con unos cuantos dedos, ya no los diez de antes. Pobrecito de yo, pues tengo una mano rota.
Van a descansar los “curitas”, los “calenturientos” de Las Rosas, el pobre del Sergio Lobato (eso no quita que siga investigando el paradero de los 60 millones que le mandaron a seguridad), porque sí puedo conducir y caminar y platicar y hacer llamadas telefónicas.
Bueno, en última instancia puedo contratar los servicios de otra suculenta secretaria que sepa recibir el dictado con las piernas cruzadas y la faldita hasta arriba.
Ojo, chicas bonitas, sensuales, eróticas y pornográficas, En Caliente necesita una así para que le ayuden a teclear sus calenturas.
A ver si el tesorero de Lindoro, alcalde de Zapaluta, se digna enviarme una de las que tiene en su harem, no, perdón señor, una de las que tiene en palacio municipal, allá del lado de la tesorería.
Ahí hay varias chidas, entre ellas la Florecita, nomás que ella no se “descuida” ni se deja tomar foto.
Bueno, la cosa es que algo haré para dejar de andar picoteando el teclado con una mano, pero entonces ya saben, quiero una mi secretaria sólo para mí, que no sea nadadora por ninguno de los frentes, así la quiero, y que tampoco se ande dejando llevar de la Sari ni, menos, de la famosa Coco.
Señores políticos, esta es su gran oportunidad para quedar bien conmigo, que es igual a estar bien con Dios y ante la opinión pública, por tanto envíenme a sus edecarnes, perdón, e-d-e-c-a-n-e-s, para que me tomen el dictado durante los próximos tres meses. Abusados.
Con una mano rota voy a tener que recurrir también a escribir con menos letras y más ideas
sustantivas. Adiós a las digresiones o rodeos, vámonos directo a las esencias.
Amín Guillén Flores, el Coyolín Coyolero, me quiso enseñar la técnica a través de sus “recortes para quien tiene prisa”, y así voy a hacerle.
Pondré una foto y le diré directo sus cosas, sucintamente, no hay de otra, así mi secretaria y yo tendremos más tiempo para otras cosas más productivas.
Y meteré muchas fotos, aunque parezca sección de sociales.
AGRADECIMIENTOS
Por cierto quiero agradecer las finas atenciones y calidad profesional del doctor José Rubén Arturo Sánchez López, traumatólogo del Hospital de Comitán. Nadie mejor que él para este tipo de broncas; también la gestoría del Director de ese nosocomio, Francisco Javier Paniagua Morgan, y una muy amable llamada del Secretario de Salud, Javier de Jesús Castellanos Coutiño. Gente chida, chingona y chipocluda, con las tres "chi". Me cae, cada vez que visiten la página de En Caliente (http://www.en-caliente.blogspot.com) o de El Fronterizo del Sur (http://www.elfronterizosur.com) recibirán el mejor de los tratamientos. Ya lo he dicho, no sólo de pan vive el hombre, sino también de... bueno, la cosa es que yo estoy muy agradecido con ellos, por ahora no tengo otra manera de manifestarlo que así, y, obviamente, con las fotografías que aparecen en la página, para que recreen la pupila e incrementen su dosis de felicidad hoy, hoy, hoy. Por supuesto también estoy en deuda con la Secretaria del Doctor Paniagua, la señora Flor de María Gómez Gordillo, un océano de amabilidad, o muchos océanos, toda una inmensidad.
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