- El perredista Carlos Navarrete a favor de la delincuencia y el crimen.
La semana pasada dijimos aquí que existen algunos políticos que, en el afán de agenciarse una curul ya sea estatal o federal o bien algún “hueso carnoso” en los organigramas gubernamentales, pierden hasta LA VERGÜENZA con el fin de conseguir lo que sus muy particulares gustos y deseos se les antoja. Es el caso del bravucón y matasiete de Carlos Navarrete Ruiz quien, sin medir consecuencia alguna, afirmó en Tuxtla Gutiérrez que al ÉL NO LE IMPORTA DE DONDE VENGAN LOS CANDIDATOS y lo que le importan son los votos y las diputaciones. La versión hecha pública el pasado fin de semana por Humberto (a) “En Tito” Osorio Espinosa, hermano del aspirante a diputado federal por Motozintla, Saraín Osorio Espinosa, en el sentido de que, tanto su hermano como Daniel Sánchez Martínez, ya le habían calentado la bolsa a Jesús Ortega Martínez y la del baladrón de Carlos Navarrete con varios millones de pesos para “amarrar o asegurar” la candidatura perredista y que ya, según “El Tito” “había quedado listo en México”, viene a corroborar y a darle la razón a lo dicho por el senador de marras en el sentido de que NO IMPORTA DE DONDE VENGAN LOS CANDIDATOS si no lo que importa y vale es la MILLONIZA que ellos se lleven a la bolsa aunque provengan del crimen organizado, de la delincuencia o del narcotráfico. PARA ESO ME SGUSTABAS Carlos Navarrete Ruiz. Perfil Fronterizo esperaba el reconocimiento y respaldo pero nunca imaginó que fuera el propio estriado y magullado Navarrete Ruiz quien le diera la razón respecto a que el Partido de la Revolución Democrática es un partido prostituido, adulterado, violado y mancillado en todos los términos y sentidos literal y carnalmente hablando porqué se ha vuelto nido, guarida y refugio de delincuentes, de narcotraficantes, de criminales, de violadores, de engañabobos, de defraudadores, de vividores, de oportunistas, de arribistas y de cuanto animal raro se ha acercado a este amarillento partido al que han destruido ideológica, moral y socialmente porqué igual les da recibir a un priísta, a un panista, a un petista y a cualquier sapo, cangrejo y alimaña porque para nada les IMPORTA DE DONDE VENGAN LOS CANDIDATOS sino los cientos de miles y millones que van a parar a sus bolsillos. Ese que no solo se decía si no que lo demostraba ser el partido de los pobres, se está convirtiendo o mejor dicho está convertido ya en la peor babilonia bíblica donde se vende la carne humana al mejor postor y, como aquí mismo lo señalamos hace unas semanas, la Zona Rosa, Clímax, El Romance, El Gitano, Las Amazonas, San Remo y cualquier lupanar de los millones que abundan en el estado y en el país, se quedan corto ante el manoseo, fornicación y “cochinero” carnal que se vive en el PRD. Por eso y en Chiapas, los criminales de diversas especies están aprovechando la coyuntura oportuna para encontrar impunidad mediante el fuero que da una diputación para posteriormente continuar con sus ilícitos con la complacencia de senadores como Carlos Navarrete Ruiz. Es por ello que a Daniel Sánchez Martínez, uno de tantos arribistas llegados de quien sabe donde y aspirante externo del so azteca, le vale máuser tener o no identificación entre la base electoral del VIII distrito porque sabe que “con dinero baila el perro” y sin él “baila como perro” ante la inminente compra de la candidatura que le de inmunidad. Sánchez Martínez, con escuela y adiestramiento del “Chucho” mayor apellidado Ortega y de Navarrete Ruiz, le vale sorbete haberse rodeado también de puro delincuente a los que nombró como coordinadores de su campaña aún cuando estos llevan a cuestas sendos expedientes que dan cuenta de sus rapiñas en algún ayuntamiento donde fueron empleados y donde hasta los neumáticos de los tractores, camiones de volteo y herramientas se robaron para posteriormente venderlas y con cuyas “ganancias” irse a darse la gran vida en Palenque u otros que, por polleros, fueron detenidos y encarcelados. Sin abundar -claro- sobre quienes, utilizando los cargos públicos e influencias, se iban de parranda y francachela donde disfrutaban de sendas orgías y desenfrenos amatorios sin importarles que lo hicieran con homosexuales o con damas de dudosa procedencia y de condiciones de salud en tela de duda. Pero como NO IMPORTA DE DONDE VENGAN LOS CANDIDATOS mucho menos la gentuza o chusma que los rodea pues, ya abundaremos. He dicho
Dicen que…
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