Chemingo Argüello retenido, piden su renuncia

Ya volvieron los problemas en Las Rosas, municipio gobernado por José Domingo Argüello Ruiz, un viejito que ni en su juventud supo gobernar a su mujer (se le juyó con otro), menos a esta edad, y mucho menos a un pueblo tan aguerrido como el pinolteco.
Ayer no sólo fue tomado el palacio municipal, sino dejaron en calidad de "retenidos" al propio alcalde, cuyo nivel de azúcar se habrá descompensado, a los regidores y síndico del ayuntamiento, y al Secretario Municipal.
Pobres, andan sufriendo la ineptitud de Chemingo Argüello.
Y ahí seguirán hasta que Chemingo firme su renuncia, ya que no soportarán más a un “patán” en la presidencia, según denunciaron los inconformes.

La noche de este lunes se habrán dado "calorcito" en la Sala de Cabildos, donde fueron sorprendidos por los inconformes.

Los regidores propietarios que acompañan en el “encierro” son Héctor Aguilar Ruiz, Maria Azucena Padilla López, Martín Agenor Ballinas Ruiz, Karla Consuelo Gamboa Guillén, Antonia Tovilla Núñez y Francisco Velasco Roblero, así como también la síndico Juana María Torres Cortés, y los plurinominales Adrián Coronel Pech (PRI), Miguel Mazariegos (Convergencia) y Román Bermúdez (PAN).

Meneses Velasco dijo que la gente del campo y de la ciudad ya está harta de tantas mentiras e incumplimientos del alcalde Chemingo Argüello, pues “de su boca sólo salen falsedades”. Ha perdido credibilidad el edil.

"Para tratar de avanzar antes aceptamos firmar minutas de acuerdo, pero el presidente no respeta a su firma, por lo que nunca cumplió con lo que pactó en la Secretaría de Gobierno, en Tuxtla Gutiérrez. Entonces ahora no firmaremos nada, simplemente que firme su renuncia el presidente y saldrá libre", dijeron los campesinos.

En esta movilización participan los ejidatarios de Joaquín Amaro, Cerro Blanco, San Isidro la Cuchilla, Plutarco Elías Calles, Soctic, Tres Amores, La Reforma, entre otros.

La gota que derramó el vaso fue la intentona de declarar reserva federal Pueblo Viejo.

Los campesinos no quieren, por una razón: les quitarán sus tierras.

Ya no podrán ir por leña, por un vejuco, por agua.

"Cuando queramos entrar a nuestras montañas vamos a tener que pagar", dijo rtemio López Sántiz, micrófono en mano. Él es el comisariado ejidal de Soctic, uno de los pueblos afectados.

Los otros ejidos afectados son los ejidos El Barreño, Vista Hermosa, Soctic, Guadalupe Las Canoas, San Juan Las Tunas, Concantic, Las Cumbres, Carmen La Reforma, y ejido Villa Las Rosas.

“¡No nos quitarán nuestras montañas!”, gritaban.

En Asamblea Ejidal, realizada el domingo primero de marzo al medio día, los hombres del campo dieron un “No” rotundo a la intentona del presidente de “quitarles sus tierras” y regalárselas al gobierno federal, concretamente a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, la que ha decidido crear en pueblo viejo una “reserva federal”.

“Ya le dijimos que no, definitivamente no, porque no queremos que nos quiten algo que es nuestro desde hace cientos de años; si el presidente le regala nuestras tierras al gobierno ya no tendremos dónde tomar un leño, una planta silvestre, un bejuco, verduras, y cuando queramos salir a caminar al campo y nadar en los arroyos nos van a cobrar, y eso no lo vamos a permitir”, dijo el comisariado ejidal.

“Lo amarremos al presidente”, gritaron varios ejidatarios.

“Lo colguemos”, gritaron otros, enfurecidos.

“Aquí tenemos esta soga”, expresó otro campesino al tiempo que se acercó al presidente del comisariado ejidal para entregárselo.

Otro de los presentes dijo que la soga ahí presente aguanta muy bien para amarrarlo a él y a la titular de la Unidad de Procuración de Fondos de la CONANP, Fabiana Dinora Arévalo Zenteno, la causante de este problema; “así aprenderán a respetar al campesino y a sus tierras”, expresó, al tiempo que los demás dijeron, al unísono, “está bueno”.

Uno más dijo que no es justo que mientras José Domingo Argüello Ruiz pretende vender su terreno en 3 millones 600 mil pesos al ayuntamiento, los campesinos deban regalar sus tierras a Felipe Calderón, para que después les hagan operativos policíacos como el de Chincultik, en Trinitaria, donde también el gobierno federal se apoderó de las tierras de los campesinos.

“Chemingo Argüello se comprometió a no aceptar la solicitud de la CONANP, pero estamos viendo que nos pretende engañar, pero vamos a ir a presentar nuestra queja a la Fray Bartolomé de las Casas, para que ahí defiendan nuestros derechos humanos”, expresó Artemio López Sántiz.
Ahora Chemingo Argüello cosecha lo que siembra.
Por humanidad ya déjenlo en paz, que se vaya a su casita a caminar en sus terrenos, sirve para su salud, en la presidencia sólo está enfermándose, una licencia por tiempo indefinido podría salvarle la vida.