Benigno May Tun, el Jefe del Sector Educativo 08, viola sus propios reglamentos, por desconocimiento o rebeldía, no se sabe, ya le habremos de preguntar.
El caso fue el siguiente: Se trataba de un curso de actualización a maestros (as), programada para el día sábado 31 de enero del 2009, que por "acuerdo democrático" y con el consentimiento de May Tun, se trasladó para el día miércoles 28 de enero del mismo año.
La intención era aprovechar el "puente" del mal llamado "fin de semana largo" (el día inhábil era el 5 de febrero, Aniversario de la Promulgación de la Constitución, pero se pasó al lunes 2 del mismo mes, por mandato de la SEP), el cual no lo hubiera sido tanto si ese sábado hubiera habido curso.
Habría de checar la fecha de las constancias entregadas a los maestros participantes de ese curso de actualización: ¿Tendrán la fecha real o le cambió día, hora y lugar de realización?
¿Incurrirá el susodicho en falsificación de información?
¿Además de pecar de omisión peca de acción?
Sin embargo, esto no fue el problema.
Porque si él quiso hacerse de la vista gorda y prácticamente "legitimar" o "validar" con su presencia física el cambio de sede, fecha y horario del curso, es posible que otras autoridades, superiores, también hagan lo propio, y todos tan tranquilos.
La otra violación al reglamento fue la cantidad de horas de capacitación, siempre con la "venia" de May Tun: le mocharon 4 horas, pues en lugar de siete horas de curso sólo se dieron tres: de cuatro a siete de la tarde. ¿Entonces? ¿Qué irán a decir las constancias? Cualquier cosa, mientras haya quien se haga de la vista gorda.
Pero desafortunadamente estas violaciones a un reglamento no son las peores cosas ocurridas y avaladas por el Jefe de Sector 08, sino mucho más:
El señor violó la autonomía de una institución educativa, a cuyo Director no sólo ignoró, sino inclusive despreció.
¿A quién le pidió permiso para introducir a sus maestros "capacitandos" a la escuela primaria vespertina "Nicolás Bravo"?
En la citada primaria jamás se recibió un oficio de solicitud para que ahí les permitieran un salón de clases donde realizar el curso. No lo hay.
Bueno, ni siquiera de manera verbal le dijeron al Director de la Nicolás Bravo que si acaso era tan amable de prestarles un aula.
Es más, cuando el directivo descubrió la violación de la autonomía de su escuela y vio al responsable de la misma, extrañado, lo fue a invitar a que explicara esa omisión o esa agresión.
La respuesta del Jefe de Sector fue: "No profesor, tengo muchos problemas, esto ya se echó a perder".
Lo invitaron a acudir a la dirección de la primaria para resolver los problemas, y no aceptó.
Era para decirle que no debía introducir a maestros de otras escuelas a una institución a cuyos directivos nunca les pidieron permiso.
Era para decirle que estaba violentando la autonomía de una escuela primaria.
Era para decirle que una persona con educación, que no sólo con licenciaturas, maestrías o doctorados, debe pedir permiso antes de entrar a cualquier recinto donde están otras personas trabajando. Lo cortés no quita lo valiente.
Era para decirle que estaba poniendo en peligro la vida de los niños y las niñas de la escuela a la que estaba entrando sin pedirle permiso a nadie, introduciendo vehículos justo al lugar donde los pequeños de la primaria vespertina practicaban algún deporte, activación o sus actividades de educación física.
Nomás para eso, pero él respondió: "No, tengo muchos problemas, esto ya se echó a perder".
Otro maestro de la misma escuela quiso apoyar a su director, en su lucha por exigir respeto a la escuela cuya soberanía estaba siendo mancillada, pero la respuesta del Jefe de Sector fue, otra vez: "No, tengo muchos problemas, esto ya se echó a perder".
El problema se hace más grande cuando con su actitud, el Jefe de Sector 08 avala y legitima las sistemáticas violaciones a la autonomía de la escuela vespertina a manos del Director de la escuela matutina, Rafael Morales Vázquez.
Las violaciones que este señor (ahora tiene el poder de ser Director de la escuela matutina y, a la vez, Secretario General de la Delegación Sindical a la que pertenecen docentes de una y otra escuela) ha cometido son de antología:
1.- Le cerró los sanitarios a los niños y niñas del turno vespertino, a fin de que únicamente fueran usados por el alumnado del matutino. Como solución los del turno vespertino acondicionaron un baño "urgente" para que ahí, niños y niñas, entraran a satisfacer sus necesidades fisiológicas.
2.- Le quitó el estacionamiento a los maestros del turno vespertino. Rafael Morales creyó que el edificio donde funciona la escuela "Maestro Esteban Alfonso" era suyo y de sus compañeros de turno. Punto. ¿Ignorancia supina? Cualquier cosa, pero les cerró el estacionamiento.
3.- Dejar sin techo las aulas de los niños y niñas de la escuela matutina, mandándolos a trabajar en plena intemperie. ¿Por qué no les dio otros salones si tiene tantos? Quizá por que para Rafael Morales los alumnos de la tarde no merecen ninguna atención.
4.- Lo más reciente que hizo el señor Director de la escuela matutina "Maestro Esteban Alfonso" fue cerrar la entrada principal para que los alumnos de la escuela vespertina no utilizaran esa entrada, no fueran a ensuciarla, sobre todo porque habían realizado trabajos de rehabilitación.
5.- Lo último que el director de la primaria "Maestro Esteban Alfonso" y Secretario General de la Delegación Sindical D-I/309 está haciendo es negar el servicio de Enciclomedia. ¿Para qué otorgárselos si son del turno vespertino?
Pues el señor Rafael Morales es uña y mugre de Benigno May Tun y de la Supervisora de la Zona Escolar 144, Elsa Guadalupe Villafuerte Martínez, quizá se ha ganado la gracia de estos jefes educativos por todas sus acciones a favor de la infancia del turno vespertino.
Y si no es así que se deslinden de él y lo sancionen, porque antes que monumentos merece oficios de extrañamiento y destitución. Fsur.
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